A pesar de tener que luchar contra la prohibición, la estigmatización y las estrictas restricciones normativas, el mercado legal del cannabis está surgiendo rápidamente en varias jurisdicciones de todo el mundo. El principal impulsor de este mercado es el sector del cannabis medicinal, que está ganando terreno rápidamente gracias a un creciente conjunto de investigaciones científicas y clínicas que respaldan la eficacia del cannabis medicinal.
El término cannabis medicinal, también conocido como marihuana medicinal o MMJ, se utiliza para describir cualquier medicina basada en plantas que ha sido creada utilizando extractos de la planta de cannabis y es prescrita por los médicos. Los beneficios terapéuticos de la planta de cannabis se asocian en gran medida a las moléculas denominadas cannabinoides, que son compuestos farmacológicamente activos que se encuentran en la planta de cannabis.
La planta media de cannabis contiene más de 120 cannabinoides diferentes, además de una serie de otros fitoquímicos que han demostrado su potencial terapéutico. Los dos cannabinoides más conocidos son el CBD y el THC.
Mitos sobre el CBD
El CBD y sus efectos son cada vez más conocidos por los consumidores habituales, ya que el compuesto es el centro de la investigación médica, los medios de comunicación populares y la legislación sobre el cannabis. El CBD comercializado sigue apareciendo en las estanterías de todo el mundo.
Aunque el CBD y sus afirmaciones sobre la salud son muy positivos, también hay mucha información errónea. Tanto si has oído hablar del CBD a través de familiares, amigos, profesionales de la salud o fabricantes, la información que recibes puede ser diferente cada vez.
Dado que cada vez más consumidores recurren al CBD con fines médicos o de bienestar, la claridad en torno a las declaraciones de salud asociadas es más importante que nunca para garantizar la seguridad de los consumidores y la viabilidad de los medicamentos basados en el cannabis. El CBD es un compuesto rodeado de muchos mitos y conceptos erróneos, por lo que vamos a explorar algunos de los principales que es probable que encuentres.
1] El CBD es para fines médicos mientras que el THC es para fines recreativos
Como se ha mencionado anteriormente, hay muchas afirmaciones de que el CBD puede mejorar una amplia gama de condiciones de salud. Algunas de estas afirmaciones incluyen la capacidad del CBD para tratar condiciones como el dolor crónico, la ansiedad, el insomnio, varias formas de epilepsia e incluso el acné.
Estas afirmaciones están respaldadas por los testimonios de los fabricantes de productos de CBD y de los consumidores, así como por un importante conjunto de investigaciones y pruebas clínicas.
Mientras que el CBD recibe todo el reconocimiento por ser el principal compuesto terapéutico extraído del cannabis, hay otro importante fitocannabinoide que no recibe el mismo nivel de reconocimiento médico. Al igual que el CBD, el tetrahidrocannabinol (THC) es el otro cannabinoide principal que se encuentra en el cannabis y al que se atribuye la producción de muchos de los efectos fisiológicos de la planta.
En la mayoría de las jurisdicciones los productos de cannabis medicinal sólo pueden contener trazas de THC o los productos que lo contienen están completamente prohibidos.
En Estados Unidos, el límite para estos productos no supera el 0,3% de THC y en la Unión Europea, el límite es del 0,2% de THC. Para el caso de Colombia están permitidos productos con menos de 1% de THC, pero la regulación solo aplica para cosméticos, se espera en los próximos meses la autorización para productos veterinarios y durante el próximo año la regulación para alimentos y bebidas.
La razón principal de estas precauciones se debe a la preocupación por la psicoactividad del THC y sus efectos a largo plazo. Los efectos psicoactivos del THC son los principales responsables de producir el “subidón” con el que se asocia el cannabis. Por ello, el THC tiene la reputación de ser utilizado únicamente con fines recreativos, mientras que el CBD tiene la reputación de ser utilizado con fines medicinales.
Esta es una falsa dicotomía, ya que el THC tiene muchos beneficios medicinales, con numerosos ensayos clínicos que detallan algunas propiedades notables y médicamente relevantes. Algunas de ellas son el alivio de los síntomas de dolor, el insomnio y las náuseas, entre otros.
¿Pero qué hay de lo contrario? Aunque el CBD tiene claramente algunos beneficios para la salud, no son muchos los consumidores que utilizarían este compuesto con fines recreativos, ya que no produce un efecto “gratificante” o placentero. El CBD no se asocia normalmente con efectos eufóricos, antojos o cualquier potencial de abuso de drogas.
Aunque el CBD no produce ningún tipo de euforia, puede permitir que el consumidor se sienta más relajado, concentrado y aliviado del estrés en entornos sociales. El CBD no sólo debe tomarse para tratar afecciones médicas graves, sino que también puede disfrutarse socialmente o para mejorar ciertas actividades.
2] El CBD no es psicoactivo
El THC es el principal compuesto psicoactivo de las plantas de cannabis y es el responsable de producir el “subidón” del cannabis El CBD no contribuye a este subidón, lo cual es uno de sus principales puntos de comercialización. Los fabricantes se apresuran a señalar que el consumo de CBD no alterará la conciencia del consumidor ni le producirá ningún trastorno mental, y algunos se refieren al CBD como “no psicoactivo”.
Se ha demostrado que el CBD tiene un impacto en nuestra psique, pero a menudo de forma beneficiosa, ya que los estudios han descubierto que el compuesto tiene propiedades ansiolíticas, antipsicóticas, antojadizas, de alerta y de elevación del estado de ánimo. Incluso en dosis muy elevadas, el CBD no perjudica el funcionamiento mental y físico de la mayoría de los consumidores.
Lo que ciertos fabricantes quieren decir cuando se refieren al CBD como “no psicoactivo” es que no produce ningún tipo de “subidón”. Algunos términos más informativos y veraces para describir las acciones del CBD son no intoxicante o no perjudicial.
3] El cannabis es una droga catalogada, por lo que no se han realizado investigaciones sobre el CBD
Aunque la prohibición ha obstaculizado ciertamente la investigación sobre el cannabis en el pasado, es una falacia afirmar que no se ha realizado ninguna investigación adecuada sobre el CBD y sus efectos. En los Estados Unidos, el cannabis está clasificado como una droga de la Lista 1, sin embargo, muchas universidades y organizaciones de todo el país han sido autorizadas a realizar investigaciones sobre la planta.
Por ejemplo, la Universidad de San Diego, en California, está realizando actualmente ensayos clínicos para determinar si el cannabidiol puede ser útil para los niños con autismo. Hay muy pocos tratamientos que sean eficaces para reducir los graves problemas de comportamiento asociados al autismo, por lo que se espera que el Epidiolex, una solución de CBD aprobada por la FDA, pueda reducir estos comportamientos problemáticos.
Este es sólo un ejemplo de los innumerables estudios que se están llevando a cabo sobre el CBD, y no se limitan a las instituciones norteamericanas. De hecho, Israel fue el primer país en investigar adecuadamente el cannabidiol y ahora se pueden encontrar una serie de estudios sobre el compuesto en varios países del mundo.
En el Reino Unido, un estudio de 2018 mostró resultados prometedores en el uso del CBD para tratar la colitis ulcerosa. Aunque esto no signifique que el CBD sea la cura definitiva para la colitis ulcerosa, el cáncer de colon y la ansiedad, es una prueba de que se están realizando estudios creíbles sobre el CBD. Casi todos estos estudios están disponibles en PubMed, que tiene más de 20.000 citas sobre el sistema endocannabinoide (ECS) y los fitocannabinoides como el cannabidiol.
Hay que tener en cuenta que muchas de estas investigaciones se han llevado a cabo en cultivos celulares y en varios modelos animales, pero no muchas se han realizado en humanos. Una excepción a esto es la investigación que se ha llevado a cabo en niños pequeños con trastornos convulsivos genéticos raros, sin embargo, es necesario realizar más investigaciones sobre la eficacia del CBD en el tratamiento del dolor, la ansiedad y el insomnio con el fin de apoyar las afirmaciones de marketing.
4] No se ha demostrado clínicamente que el CBD mejore las condiciones de salud
Es cierto que muchos de los beneficios reportados del CBD, como sus efectos analgésicos, ansiolíticos y anticancerígenos, requieren más investigación. Actualmente, el CBD no ha sido aprobado como tratamiento para afecciones como el dolor crónico, la ansiedad, el insomnio, las migrañas y la EII, a pesar de las pruebas clínicas y anecdóticas que apoyan su eficacia.
Pero esto no significa que el CBD no haya sido aprobado para otras condiciones específicas. En junio de 2018, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobó Epidiolex, una solución de CBD administrada por vía oral, para el síndrome de Lennox-Gastaut y el síndrome de Dravet. Estas condiciones son trastornos convulsivos que afectan predominantemente a los niños y eran difíciles de tratar antes de la aprobación de Epidiolex.
Epidiolex es el primer medicamento derivado del cannabis (y basado en el CBD) que recibe la aprobación de la FDA desde que el cannabis pasó a ser un estupefaciente de la Lista 1 en 1970. Esto fue un logro monumental, ya que el gobierno federal de los EE.UU. consideró en su día que los medicamentos pertenecientes a la clase de la Lista 1 no tenían valor médico.
También se están llevando a cabo numerosos ensayos clínicos sobre la eficacia del CBD para el tratamiento de ciertas condiciones de salud, por lo que es probable que el compuesto sea aprobado para más de estas condiciones en un futuro próximo.
En la actualidad, muchos consumidores están utilizando el CBD para afecciones para las que aún no ha sido aprobado. Sólo el tiempo y una mayor investigación determinarán cuántos de los beneficios para la salud del CBD son médicamente relevantes.
5] El CBD funciona activando los receptores cannabinoides
El sistema endocannabinoide (SCE) es un conjunto de receptores cannabinoides que se encuentran en todo el cuerpo, con mayores concentraciones en el cerebro y la médula espinal. Se trata de un complejo sistema de señalización cuya función principal es mantener la homeostasis, es decir, el equilibrio de las condiciones internas, físicas y químicas del organismo.
Este sistema nos ayuda a responder a las enfermedades y lesiones, a restablecer el equilibrio a nivel celular y mantiene constantemente el bienestar de nuestros órganos y tejidos. Cuando se activa por completo, el SCE puede influir en aspectos como el apetito, el sueño, las emociones, la memoria, la temperatura corporal, la nocicepción, el sistema inmunitario y el sistema nervioso.
La eficacia del cannabis medicinal y sus productos asociados en el tratamiento de afecciones neurológicas, inflamatorias, gastrointestinales, psiquiátricas, infecciosas y metabólicas se debe en gran medida a sus interacciones con el SCE.
El THC, el principal compuesto intoxicante (y terapéutico) que se encuentra en el cannabis, ejerce sus efectos activando los receptores CB1 del SCE. Esto estimula una serie de actividades celulares diferentes que restauran el equilibrio fisiológico, y algunos de los beneficios terapéuticos resultantes son el alivio del dolor y el estrés, la elevación del estado de ánimo y la antiinflamación.
Se podría suponer que el CBD actúa de forma similar al THC, ya que son estructuralmente parecidos. Sin embargo, aunque pueda resultar confuso, no es así. De hecho, el CBD no estimula directamente los receptores CB1 o CB2 en absoluto.
En cambio, el CBD interactúa con el ECS de dos formas conocidas: fomentando la producción natural de endocannabinoides de tu cuerpoy amortiguando la actividad de algunos receptores cannabinoides, en lugar de activarlos. Este efecto amortiguador es también la razón principal por la que el CBD es utilizado por algunos consumidores para contrarrestar los efectos psicoactivos e inductores de ansiedad del consumo de THC.
6] Todo el CBD es igual
La molécula de cannabidiol es la misma, independientemente de si fue originalmente extraída del cannabis y del cáñamo o creada artificialmente en un laboratorio. Aunque la molécula de CBD siempre es la misma, los productos que contienen CBD disponibles en el mercado pueden variar mucho.
Por ejemplo, el aceite de CBD. Se trata de un producto naturalmente complejo que puede contener una diversa gama de fitoquímicos adicionales que se han extraído de la planta de cannabis, como terpenos, flavonoides y otros cannabinoides, como el THC. Los productos que contienen CBD además de estos compuestos se denominan extractos de CBD de espectro completo.
Se cree que los extractos de espectro completo proporcionan más beneficios que el CBD consumido por sí mismo, en gran parte debido a un fenómeno conocido como el ‘Efecto séquito’. Este efecto describe la forma en que estos compuestos actúan juntos de forma sinérgica para proporcionar beneficios adicionales para la salud a los que proporcionan cuando se consumen solos.
Por ejemplo, el THC puede potenciar los beneficios del CBD sobre el dolor y la inflamación, mientras que terpenos como el limoneno pueden proporcionar efectos antibacterianos y ansiolíticos. Por eso, los aceites de CBD de distintos proveedores pueden contener moléculas muy diferentes, aunque ambos contengan la misma dosis de miligramos de CBD.
Por el contrario, El aislado de CBD son productos de CBD purificado. Estos productos suelen encontrarse en forma de polvo o cristal y suelen ingerirse directamente o como aditivo alimentario. El aislado de CBD también se puede infundir en aceites portadores, como el aceite de oliva, para crear tus propios aceites de CBD o aceites seguros para la piel para crear tus propios tópicos de CBD.
Independientemente de su composición, un gran número de productos de CBD disponibles en el mercado están realmente mal etiquetados. En un estudio de 2017 los investigadores compraron 84 productos de CBD diferentes en línea y descubrieron que solo 26 habían sido etiquetados correctamente (es decir, contenían CBD dentro del 10% de la cantidad declarada). 36 de estos productos contenían más CBD del indicado en el envase y 22 contenían menos.
Comprar CBD puede ser complicado, especialmente en línea, y puede ser difícil saber en qué minorista confiar. Sin embargo, es imprescindible investigar un poco antes de comprar un nuevo producto de CBD, para garantizar su legitimidad y seguridad. Los consumidores deberían buscar marcas probadas por terceros de laboratorios con licencia y reputación, y productos de CBD que contengan extractos de plantas enteras, ya que éstos ofrecen el mejor perfil de seguridad y beneficios médicos.
7] Un poco es suficiente
En el caso de los productos de CBD que contienen poco o nada de THC, se recomiendan dosis altas con más frecuencia. ¿Por qué? Miligramo a miligramo, el CBD es mucho menos potente que el THC para aliviar los síntomas. Por ejemplo, alguien que experimenta un alivio del dolor o del estrés con 3-5mg de THC puede necesitar 30-200mg de CBD para conseguir los mismos resultados.
Los efectos del CBD sólo son perceptibles si se consume a diario y en grandes dosis. La investigación en esta área ha sido notablemente consistente. Los estudios que han utilizado CBD de grado farmacéutico para tratar la ansiedad, la esquizofrenia y la epilepsia han requerido cientos de miligramos de CBD por dosis.
En los estudios en los que se han utilizado roedores, niños y a veces adultos como sujetos de prueba, la dosis efectiva de CBD suele oscilar entre 10 y 20 mg por kilo de peso, que deben consumirse diariamente. Para un adulto de 70 kg, esto equivale a tomar una dosis de CBD de entre 700 y 1400 mg al día. Por desgracia, esto es sencillamente inasequible para la mayoría de los consumidores.
Dicho esto, las dosis bajas de CBD pueden proporcionar beneficios leves. Si se utiliza para tratar un dolor inflamatorio ocasional, la dosis recomendada es de 25-50mg al día. Los que sufren de convulsiones, Parkinson, ELA y dolor crónico necesitarán una dosis mucho mayor de CBD.
8] Mucho es mejor
Aunque las dosis altas de CBD pueden ser más eficaces, consumir demasiado no es necesariamente mejor. Esto puede parecer contradictorio con el punto anterior, pero hay algunas explicaciones para ello.
El aislado de CBD, en particular, tiene un pico de dosis efectiva, en el que las dosis más altas y más bajas a ambos lados empiezan a ser ineficaces. Desgraciadamente, los estudios han descubierto que este pico terapéutico es estrecho y difícil de precisar.
Por ello, parece que los productos de CBD aislado pueden ofrecer menos beneficios para la salud que los productos de CBD de espectro completo. Esto se debe a que los otros cannabinoides, terpenos, flavonoides y otros fitoquímicos presentes en estos extractos proporcionan efectos terapéuticos adicionales.
Algunos ensayos clínicos también han informado de que dosis muy elevadas de CBD (por ejemplo, 1000 mg al día para un adulto de 70 kg) también pueden aumentar el riesgo de efectos secundarios. Aunque reducir la dosis de CBD puede reducir su eficacia terapéutica, también mitiga la aparición de cualquier efecto adverso.
En la actualidad no existe una dosis ideal de CBD para un paciente o una enfermedad determinada. Con los numerosos productos de CBD que ya existen en el mercado y los que se fabrican constantemente, lo más probable es que no haya directrices estandarizadas en breve. Ponte en contacto con tu médico o consulta una guía en línea para que puedas encontrar la dosis óptima de CBD que te funcione.
9] El CBD no tiene efectos secundarios
Con todos los beneficios para la salud del consumo de CBD y las noticias positivas en torno a la industria del CBD, es posible que pienses que el compuesto no tiene muchos efectos secundarios o ninguno. Esta no es la realidad. Cualquier fabricante de productos de CBD que te diga lo contrario no está buscando lo mejor para ti.
Como la mayoría de los medicamentos, el CBD no es adecuado para todo el mundo y puede tener algunos efectos secundarios potenciales especialmente cuando se consume en dosis elevadas. Uno de los más importantes que hay que tener en cuenta es cómo interactúa el CBD con otros medicamentos recetados.
El CBD puede alterar la forma en que nuestro cuerpo metaboliza ciertos medicamentos, especialmente los que vienen con advertencias sobre el consumo de pomelo. El CYP3A4 es una enzima vital que se encuentra en el intestino y que es responsable del metabolismo de muchos medicamentos Cualquier consumo de pomelo o de su zumo puede inhibir esta enzima, resultando en un exceso de medicamento flotando en el torrente sanguíneo.
El CBD actúa de forma similar al zumo de pomelo en este sentido y puede inhibir el CYP3A4 así como otra enzima llamada CYP2D6. Los medicamentos que deben evitarse al consumir también CBD incluyen anticoagulantes como la warfarina, anticonvulsivos, antivirales para el VIH, estatinas para reducir el colesterol, algunos medicamentos para la hipertensión y ciertos agentes anticancerígenos, entre otros.
Otros efectos secundarios que algunos consumidores han señalado con el uso del CBD son las náuseas, la fatiga y la irritabilidad. Aunque estos efectos secundarios pueden presentarse, a menudo es sólo después de tomar grandes dosis de CBD, como se ha visto en algunos estudios, o junto con otros medicamentos recetados.
Si eres consumidor de CBD y experimentas efectos adversos, consulta con un médico para saber si el CBD es la opción adecuada para ti y si estás comprando tu suministro en una fuente de confianza. Si los problemas persisten, considere la posibilidad de reducir su dosis de CBD o dejar de consumirlo por completo.
10] El CBD es una estafa de marketing / una industria turbia
La industria del bienestar es un gran mercado, que alcanza un valor de 4,5 billones de dólares en 2018 lo que representa el 5,3% de la producción económica mundial. El gran tamaño de esta industria requiere una interacción constante con el consumidor y la innovación de productos para mantener un fuerte crecimiento de los ingresos.
Como resultado, cualquier compuesto nuevo y excitado con numerosas declaraciones de salud (por ejemplo, el CBD) puede incluirse innecesariamente en una gama de productos cosméticos y de bienestar. Aunque algunas de las aplicaciones del CBD en un producto determinado puedan parecer innecesarias, esto no significa que TODAS las aplicaciones del CBD lo sean.
Siempre que estas oportunidades se presenten a las empresas del sector, intentarán incluir estos compuestos en sus productos si hay suficiente interés y demanda por parte de los consumidores. Esto puede parecer una estafa de marketing, pero es simplemente una forma de que estas empresas aumenten el precio de estos productos, ya que afirman que proporcionan beneficios adicionales para la salud.
Sin embargo, esto no cambia el hecho de que el CBD tenga esos beneficios para la salud de los que se habla. Si bien es cierto que el CBD no tiene por qué estar en la mayoría de los productos en los que termina, esto no disminuye el hecho de que el CBD en sí tiene aplicaciones médicas legítimas. No dejes que la sobresaturación de productos de bienestar con CBD te engañe y pienses que este compuesto es sólo una moda.
Como ya hemos comentado, una gran parte de los productos con infusión de CBD que se pueden encontrar en Internet están mal etiquetados. Epidiolex es actualmente el único medicamento de CBD aprobado por la FDA, por lo que los críticos de la industria del CBD tienen razón al destacar los problemas de calidad que se derivan del etiquetado erróneo.
Sin embargo, sería un error confundir los productos de CBD de baja calidad con los de alta calidad. Aunque algunos fabricantes sospechosos pueden etiquetar los productos de CBD de forma incorrecta, los productos de CBD legítimos y de buena procedencia pueden proporcionar numerosos beneficios a los consumidores de cannabis medicinal de todo el mundo. Por eso es importante que cada posible consumidor de CBD investigue por su cuenta cómo es un producto de CBD en colombia de calidad y qué es legal en su parte del mundo.
Usos y beneficios del CBD
Aunque hay una gran variedad de productos de cannabis medicinal que se pueden encontrar en el mercado, los que contienen CBD en Bogotá son los más comunes. Los productos basados en el CBD se asocian con una mayor gama de beneficios terapéuticos y menos efectos secundarios indeseables en comparación con otros productos de cannabis medicinal, como la flor seca.
Si no has oído hablar del CBD es posible que estés confundido por lo que es y lo que significa. CBD es un acrónimo de cannabidiol, que se clasifica como un cannabinoide. El CBD es específicamente un fitocannabinoide, lo que significa que es un cannabinoide extraído de una planta, a diferencia de un endocannabinoide, que se produce naturalmente en nuestro cuerpo.
El CBD no es sólo específico de la planta de cannabis, también puede extraerse de las plantas de cáñamo. El cáñamo contiene altas concentraciones de CBD, mientras que sólo contiene trazas de THC, que se encuentra en abundancia en las plantas de cannabis. Esta es una de las principales razones por las que algunos fabricantes prefieren extraer su CBD del cáñamo.
El interés por el CBD como producto farmacéutico y nutracéutico está creciendo rápidamente, con una gran demanda de los consumidores por estos productos. Esto se debe en gran medida a las afirmaciones de los fabricantes sobre los beneficios del CBD para la salud, además de un creciente conjunto de pruebas científicas que describen las aplicaciones médicas del CBD.
Una de estas aplicaciones médicas es el alivio del dolor que es una de las principales razones por las que muchos consumidores se decantan por el CBD. Los pacientes que sufren de dolor crónico, dolor neuropático y dolor inflamatorio pueden utilizar el CBD para ayudar a controlar estas condiciones.
La principal forma en que el CBD alivia el dolor es inhibiendo la liberación de proteínas inflamatoriaslo que lo convierte en una opción de tratamiento alternativo para quienes sufren de artritis y otras condiciones de dolor relacionadas con las articulaciones.
Los pacientes con ansiedad e insomnio también pueden encontrar útil el CBD para tratar algunos de los síntomas asociados a estas condiciones. La investigación sugieren que el CBD tiene algunas propiedades ansiolíticas y su ingesta puede provocar una reducción de los síntomas de ansiedad.
Por el contrario, Los efectos del CBD sobre el sueño aún no se conocen del todo, pero ha demostrado ser una ayuda eficaz para el sueño para algunos consumidores. Una explicación de por qué puede ocurrir esto radica en la capacidad del CBD para tratar algunas de las afecciones que son comórbidas con el insomnio, siendo el dolor y la ansiedad una de las principales.
También se ha investigado mucho sobre la capacidad del CBD para aliviar los síntomas de la epilepsia, especialmente en los niños pequeños. Aunque el mecanismo exacto de acción aún se está investigando, el CBD ha demostrado la capacidad de reducir la frecuencia y la duración de las convulsiones. El síndrome de Lennox-Gastaut y el síndrome de Dravet son dos enfermedades convulsivas que cuentan con un medicamento con CBD (Epidiolex) aprobado por la FDA.
Algunos otros beneficios potenciales que han aparecido en diferentes estudios son inhibición de tumores, el control del acné y efectos neuroprotectores. Estos productos están disponibles en una amplia gama de formulaciones, tales como Aceites de CBD tinturas cápsulas,tópicos, geles y comestibles tales como las gomitas de CBD. Por lo tanto, el CBD se puede consumir de diferentes maneras, lo que significa que podrás encontrar un producto que se adapte exactamente a tus necesidades.